El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, aseguró en un mensaje a la nación que las Fuerzas de Defensa del país (FDI, por sus siglas en español) lanzarán un ataque masivo "con una fuerza nunca vista" para atacar las posiciones del movimiento Hamás, en tanto los mandatarios de Egipto y Arabia Saudita advirtieron que el conflicto "amenaza la estabilidad de la región".

"Estamos en el tercer día de la operación. Estamos en una operación para el hogar, una guerra para asegurar nuestra existencia, una guerra que ganaremos. […] Esta guerra fue impuesta contra nosotros por un enemigo despreciable, por bestias que celebran la matanza de mujeres, niños y ancianos", afirmó Netanyahu, que ordenó ayer el cierre total de la Franja de Gaza, y el corte de suministros de energía, agua, combustibles, medicinas y alimentos.

El jefe del Ejecutivo dijo que las "atrocidades" cometidas por los combatientes "no se han visto desde las atrocidades del Estado Islámico (EI)". "Siempre hemos sabido qué es Hamás. Ahora todo el mundo lo sabe. Hamás es el EI. Y lo derrotaremos precisamente como el mundo ilustrado derrotó al EI", prometió.

De regreso

Respecto de los bombardeos repetidos a la Franja de Gaza por parte de la aviación hebrea como parte de la respuesta al ataque masivo lanzado el sábado por la organización Hamás, el premier indicó que esto es "solo el comienzo". "Dije que cada lugar donde se encuentre Hamás se convertirá en ruinas. Esto sucederá aún más en el futuro", añadió.

Además, el primer ministro subrayó que su Gobierno se esforzará por hacer "todo lo posible" para traer de vuelta a los ciudadanos israelíes retenidos por los combatientes de Hamás.

Por otra parte, Netanyahu instó a la oposición, que lleva meses protestando en las calles contra la reforma judicial, a unirse a un Gobierno de unidad nacional "sin condiciones previas".

Más de 700 israelíes han perdido la vida en el ataque y 2.150 resultaron heridos, según un nuevo balance publicado por el Ejército. Del lado palestino, 560 personas murieron por bombardeos israelíes en Gaza y 2.900 quedaron heridas, según las últimas cifras de las autoridades locales.

Advertencias

En tanto, el presidente de Egipto, Abdelfatá al Sisi, y el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohamed bin Salmán, coincidieron en advertir que el enfrentamiento entre Israel y la Franja de Gaza "amenaza la estabilidad regional".

Al Sisi destacó en una charla telefónica que es necesario "dar prioridad a la voz de la razón" y a la calma para evitar que empeore la situación humanitaria, según un comunicado de la Presidencia egipcia.

El Cairo será sede mañana de un encuentro de urgencia de los ministros de Asuntos Exteriores de la Liga Árabe, en la sede de la organización, para analizar la situación.

Por su parte, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, advirtió a su par de Israel, Isaac Herzog, que mantener las hostilidades contra civiles en la Franja de Gaza no hará más que "aumentar el sufrimiento y la espiral de violencia" en la región.

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